Esta división de la compañía ha surgido fruto de la demanda por parte de clientes internacionales de grandes fincas con instalaciones ecuestres y deportivas. Muchas de nuestras propiedades ecuestres son - o pueden ser - negocios para el alojamiento de huéspedes, escuelas de equitación, o campos de polo. España tiene una gran tradición cultural equina, con lo que ofrece a los compradores de este tipo de propiedades un gran abanico de posibilidades.